
La reforma del artículo 521 de la LOPJ lleva aparejada que el centro de destino de los funcionarios de Justicia sea el conjunto de puestos de ese mismo municipio, no uno concreto como sucedía hasta ahora. Esta circunstancia puede hacer que un funcionario sea apartado de su puesto sin más explicación que una comunicación verbal, como indica Amaya Ruiz, de STAJ.
La reforma tendrá consecuencias directas para los funcionarios, pero lo más preocupante, según STAJ, es que puede interferir de forma directa en la separación de poderes del país. "Es un ataque absoluto a nuestras condiciones de trabajo, pero lo más grave es la politización de la Justicia que lleva aparejada esta medida. Será el partido del momento, el que gobierne, el que mueva los hilos a su parecer para tapar unas causas o investigar otras. Ya sabemos que en este país hay mucha corrupción y esto podría agravar el problema aún mas", incide Ruiz.